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El Duque y el Rey son dos estafadores sin nombre a quienes Huck y Jim recogen a bordo de su balsa justo antes del comienzo de sus aventuras en Arkansas. Se hacen pasar por el duque perdido de Bridgewater y Luis XVII de Francia (muerto hacía mucho tiempo) para asombrar a Huck y Jim.
El rey es el mayor de los dos estafadores que Jim y Huck conocen en el capítulo 19, y definitivamente, es el peor de los dos. Twain mismo lo dice la primera vez que realizan una de sus fechorías; el duque estafa nueve dólares inofensivos mientras que el rey se roba 80 con pretensiones religiosas y tomando ventaja de la fe que tiene la gente.
Un esclavo fugitivo que acompaña a Huck Finn por el Río Mississippi. El Rey. El mayor de los dos hombres con quienes Huck se ve forzado a viajar. Él es el hombre desnudo del Real Nohaytalrey y es el hombre que vende a Jim como esclavo fugitivo. Es luego cubierto de brea y plumas junto al Duque. Judith Loftus
Un poco más lejos, Huck rescata a dos farsantes conocidos como el Duque y el Rey. Inmediatamente, los dos hombres toman el control de la balsa y comienzan a viajar aguas abajo y a ganar dinero engañando a las personas en varios pueblos a lo largo del río.
El Rey y Huck cruzan el río y se encuentran con un joven palurdo que espera el ferry a Orleans. Él procede a contarles cómo murió Peter Wilks, dejando todo su patrimonio a sus hijas y hermanos. Los dos hermanos aún no han llegado de Inglaterra, lo que entristeció mucho al hombre antes de morir.
Pero topan con una pareja de estafadores que se hacen llamar el rey y el duque (sin duda aquí aflora el republicanismo estadouni-dense del autor) y que les ponen en más de un brete: lo mismo re-presentan a Shakespeare, que se hacen pasar por los herederos de un rico difunto.
El Duque y el Rey están tratando de robar la herencia que dejó Peter Wilkes, haciéndose pasar por los hermanos de Peter de Inglaterra. La tía Sally y el tío Silas Phelps son una pareja, por cuyo sobrino Huck se entrega después de escapar del rey y el duque.
