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  1. El diagnóstico de la parálisis del tercer par craneal se basa en los síntomas y en los resultados de una exploración neurológica. Para identificar la causa se realiza una resonancia magnética nuclear (RMN) o una tomografía computarizada (TC) del encéfalo.

  2. La parálisis del III par craneal es un trastorno asociado con una dis-función del tercer nervio craneal (NC III), localizado en la superficie del fondo del cerebro. El nervio motor ocular común (MOC) o III par craneal tiene su ori-gen real en varios núcleos mesencefálicos situados en el pedúnculo

  3. Si un paciente tiene una pupila dilatada y una cefalea intensa y súbita (que sugiere rotura de un aneurisma) o si cada vez tiene mayor compromiso del sensorio (lo que sugiere una herniación), se indica de inmediato un estudio de diagnóstico por imágenes neurológico (TC o, si está disponible, RM).

  4. El nervio oculomotor, o motor ocular común, es el tercer par craneal (III) y su función se describe en el nombre (óculo = en relación al ojo; motor = genera movimiento). Solamente con su nombre es fácil inferir que el nervio oculomotor inerva a los músculos que mueven el ojo o sus componentes.

  5. cuando existe compromiso de todos los músculos extrao-culares existe una disfunción externa de tipo completa y cuando este no es el caso, la disfunción es incompleta.2-4 Anatómicamente, cuando esta última ocurre, se denomina parálisis divisional del III par craneal, pudiendo afectar la rama inferior o superior del nervio.2,5

  6. Cuando la causa es la compresión del tercer par craneal, la pupila acostumbra a estar afectada. Cuando la pupila no está afectada, la causa suele ser un flujo insuficiente de sangre al nervio. El trastorno causante de la parálisis empeora, conduciendo a una situación grave y de riesgo vital.

  7. En la parálisis completa del III par craneal se reconoce ptosis con divergencia y moderada depresión del ojo ( fig. 7–3 ). Hay restricción de los movimientos extraoculares en todas las direcciones, con excepción de la lateral (conservación de la función del recto lateral) ( fig. 7–3E ).