Resultado de búsqueda
(Dn 2:1-3) "En el segundo año del reinado de Nabucodonosor, tuvo Nabucodonosor sueños, y se perturbó su espíritu, y se le fue el sueño. Hizo llamar el rey a magos, astrólogos, encantadores y caldeos, para que le explicasen sus sueños. Vinieron, pues, y se presentaron delante del rey.
- Daniel Y SUS Compañeros En Babilonia
El templo del dios de Nabucodonosor sustituía al templo de...
- Rescatados Del Horno De Fuego
Rescatados del horno de fuego - Daniel 3:1-30 Introducción...
- PDF
El sueño de Nabucodonosor (Dn 2:1-3) “En el segundo año del...
- Daniel Y SUS Compañeros En Babilonia
Daniel interpreta el sueño de Nabucodonosor. 2 En el segundo año del reinado de Nabucodonosor, tuvo Nabucodonosor sueños, y se perturbó su espíritu, y se le fue el sueño.2 Hizo llamar el rey a magos, astrólogos, encantadores y caldeos, para que le explicasen sus sueños.
Dios respondió a su deseo con este sueño, que le causó una gran impresión. Pero había olvidado el sueño. Los adivinos, sabios y magos, a quienes él guardaba para interpretar los sueños, no pudieron revelar el sueño olvidado: confesaron su total impotencia. El rey los condenó a muerte.
El rey Nabucodonosor tuvo un sueño misterioso que nadie pudo explicar —hasta que Dios le dio la interpretación a Daniel. ¿Tiene algún significado para nosotros este sueño?
El sueño del rey Nabucodonosor - En el segundo año de su reinado, Nabucodonosor tuvo varios sueños que lo perturbaban y no lo dejaban dormir. Mandó entonces que se reunieran los magos, hechiceros, ...
El sueño de Nabucodonosor es un episodio bíblico. Se describe en el Antiguo Testamento, en el capítulo 2 de Libro de Daniel. El mismo narra como un joven hebreo deportado en Babilonia, Daniel, es capaz de relatar e interpretar un sueño que había perturbado al rey Nabucodonosor II.
Reina-Valera 1960. Daniel interpreta el sueño de Nabucodonosor. 2 En el segundo año del reinado de Nabucodonosor, tuvo Nabucodonosor sueños, y se perturbó su espíritu, y se le fue el sueño. 2 Hizo llamar el rey a magos, astrólogos, encantadores y caldeos, para que le explicasen sus sueños.