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Lucas 9:62. Pero Jesús le dijo: Nadie, que después de poner la mano en el arado mira atrás, es apto para el reino de Dios. Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano al arado mirare atrás, es hábil para el Reino de Dios. Jesús le contestó: —El que pone la mano en el arado y sigue mirando atrás, no sirve para el reino de Dios.
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61 Otro le dijo: —Señor, quiero seguirte, pero primero...
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Lucas 9:62. Reina-Valera 1960. 62 Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios. Read full chapter.
En Lucas 9:62, Jesús menciona la frase «Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios». Esta afirmación nos invita a reflexionar sobre la importancia de mantenernos enfocados en nuestro caminar con Dios sin distraernos ni retroceder en nuestra fe.
Reflexiones sobre el versículo. La imagen del arado y la tierra en este versículo es muy visual. Si alguien quiere arar la tierra de manera eficiente, no puede estar mirando hacia atrás todo el tiempo. Si lo hace, la línea del suelo no será recta y el trabajo no será efectivo.
Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 9:62 verso por verso - Pero Jesús le dijo: — Ninguno que ha puesto su mano en el arado y sigue mirando atrás es apto para el reino de Dios.
El que sostiene el arado no debe mirar hacia atrás; si lo hace, estropea el surco y estropea el trabajo que ha emprendido. El discipulado de Cristo es poner la mano en el arado para quebrar la dura tierra de nuestros propios corazones, para quebrar la dura tierra de los corazones de los demás.
Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.
