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La voz de los empleados consiste en darles el espacio y la oportunidad de comunicar lo que sienten sobre su lugar de trabajo y lo que ocurre en él. Fomentar la voz de los empleados es vital para construir relaciones abiertas y de confianza entre los empleados, los líderes y los gerentes, y para ayudar a los empleados a sentirse valorados.
Escuchar la voz del empleado es la oportunidad perfecta para que tu plantilla laboral exprese sus opiniones, preocupaciones y/o sugerencias sobre las políticas en el lugar de trabajo, además, te ofrece ideas para mejorar el ambiente laboral y ayuda a la dirección a implementar cambios positivos para todos.
La noción de voz de mando se emplea para nombrar a la autoridad y la facultad de liderazgo que dispone alguien sobre sus subordinados. Quien tiene la voz de mando en una entidad, puede dar órdenes a otros individuos.
Voz de mando: orden dictada de forma oral por el comandante de la tropa, en jerga militar, para el comando de las tropas en desplazamientos. Voz preventiva: indica el movimiento que se va a realizar. Voz ejecutiva: indica el momento en el que se iniciara el movimiento dicho por la voz preventiva. La voz de mando
En las voces de mando se distinguen dos partes: VOZ PREVENTIVA: se da en forma alargada para prevenir o indicar con tiempo el ejercicio que se realizará. VOZ EJECUTIVA: se da en forma más corta, especialmente cuando a través de ella se exige una enérgica ejecución.
Todas las voces de mando constan de una VOZ PREVENTIVA y de una VOZ EJECUTIVA y entre ambas debe mediar un lapso suficientemente largo para que los ejecutantes capten claramente y se preparen para cumplir con la orden que se emitirá.
La voz de mando es la voz del líder que impulsa a la acción y tiene el poder de influir en los demás, y es esencial para un liderazgo efectivo. La voz del líder debe ser auténtica, clara y enérgica, y debe transmitir confianza y seguridad.
